Cultura de empresa, satisfacción de necesidades y felicidad.

Cultura de empresa, satisfacción de necesidades y felicidad.

EL INICIO DE LA CULTURA EMPRESARIAL El concepto de cultura empresarial cobró inicial interés y actualidad en la década de los años sesenta, especialmente 1968, época en la que los valores post materialistas generaron importantes movimientos sociales en todos los órdenes, y la preocupación sobre la motivación, la satisfacción y los mecanismos para retener a los trabajadores en las empresas va a impulsar estudios de ésta y otra índole que conduzcan a evitar la sangría de empleados, muy especialmente los jóvenes, y la insatisfacción general que se detecta. Trabajos de eco relevante prosiguen en la década de los años ochenta probando el interés de lo que antes fuera novedad, y el término se va asimilando de un modo pleno y con una nueva dimensión capital para el conocimiento del comportamiento humano en las organizaciones. Un segundo factor que propicia la actualidad del término cultura de la empresa es el atractivo ejercido por el fenómeno japonés, el cual relaciona por primera vez los modos de hacer, los comportamientos y los valores del «microcosmos» que es la organización con el éxito en los objetivos económicos de la empresa moderna. Para que este éxito económico tenga lugar, debe manifestarse, en principio, un consenso sobre la comprensión de la cultura por los miembros de la organización, además de un importante grado de aceptación de ésta por parte de los trabajadores.

¿QUÉ ES LA CULTURA DE EMPRESA Y PARA QUÉ SIRVE? Podemos definir la cultura de empresa de dos formas: El conjunto de creencias y Todos los comportamientos símbolos o una red de significados observados, las normas de e imágenes compartidas referentes interrelación, los valores compartidos dentro de la empresa u organización. a una empresa u organización. La cultura de empresa nos sirve para que todo individuo dentro de una organización sea capaz de: • Enfrentar los problemas de adaptación interna como lenguaje, normas, hábitos, valores, creencias, metas y presunciones entre otros presentes en el día a día. • Superar los riesgos del entorno como planteamientos, medios y recursos de adaptación y de reingeniería.

NIVELES DE CULTURA Y SU INTERACCIÓN. Se pueden considerar tres niveles de cultura y su interacción: Nivel 1: Emplea factores visibles pero con frecuencia no descifrables como la tecnología, el lenguaje, la vestimenta y el esquema de conducta. Nivel 2: Emplea factores con mayor grado de conciencia, como valores, ideales, metas, medios y confrontables. Nivel 3, emplea factores que ya son dados por sentados, invisibles y preconscientes tales como naturaleza de la realidad, género, relaciones, actividades y el entorno.

SATISFACCIÓN DE NECESIDADES Y FELICIDAD. Las necesidades orgánicas o básicas del ser humano representan una serie de condiciones impuestas que deben ser resueltas mediante la construcción de un nuevo ambiente artificial o secundario. Este ambiente se trata en realidad de la cultura misma, la cual renace y se modifica para satisfacer necesidades con cada nivel nuevo. Las necesidades biológicas deben ser satisfechas bajo cualquier sistema de organización, una cultura que no aporta al grupo la capacidad de proveerse de los medios para satisfacer necesidades básicas se autodestruirá como grupo u organización. El grupo de necesidades básicas no constituyen las determinantes de la capacidad de motivación y satisfacción humana que pueda generar la cultura organizativa sino, su capacidad para ser fuente de autoestima y autorrealización. La dificultad experimentada por las organizaciones y sus miembros para generar culturas adecuadas a las necesidades y objetivos de la empresa, tanto como de los individuos, hace entender con claridad que no existe una cultura que cumpla las dos misiones (alcanzar los objetivos de la firma y motivar plenamente a los empleados) con perfección, sin embargo, estos grados de imperfección son medibles y mejorables buscando la efectividad de la organización y la realización plena de sus empleados.

Una vez que hayamos reconocido el impacto de la cultura corporativa sobre la motivación humana, será crucial establecer una «relación válida» entre: a. Las necesidades de orden superior y básico. b. Las características y las diferencias afectivo-emocionales de los trabajadores que se determinan en cada nacionalidad o entorno local. c. La cultura dominante en la empresa, con la idea de procurar la mejor estrategia de desarrollo del trabajador y la organización. En conclusión, podemos considerar que, en el escenario actual, es vital obtener un desarrollo pleno en la vida y en el trabajo; el único que a su vez incorpora plenamente como respuesta, las capacidades totales del hombre trabajando en una empresa u organización con el telón de fondo de las recurrentes crisis económicas y sociales que se pudieran presentar. Solo buscando este desarrollo pleno es como empresa y trabajador lograran obtener una cultura de empresa, y por medio de esta satisfacer sus necesidades y ser felices.

Referencias. González, L. (2001).Satisfacción y motivación en el trabajo. Editorial Díaz de Santos. http://librodigital.sangregorio.edu.ec/ librosusgp/13082.pdf