Poetas 2022 - IV

Proporción Amaba la calma tanto como amaba la tormenta. Dualidades, Sabía más de lo que decía, Entendía más de lo que nadie la imaginaba. Proporção Amava a calmaria na mesma proporção em que amava a tempestade. Dualidades, Sabia mais do que dizia, Percebia mais do que todos a imaginavam-na. Marcia Da Luz Leal

Poeta Internacional Matilde Mesones Sernaqué Lima / Perú Matilde Mercedes MESONES SERNAQUÉ. Nació en la cuidad de Ferreñafe (Lambayeque-Perú). Radica actual- mente en la ciudad de Lima. Biólogo Microbiólogo de profesión y Licenciada en Ciencia Tecnología y Ambiente. Pertenece a la Asociación de Poetas y escritores de la pro- vincia de Ferreñafe. Ha participado en la Antología poética familiar “Al pie de la gallarda ro- sa” en el año 2007. Publicó su poemario “Colores de la vida “en el año 2018. Participó en varias oportunidades en tiempos de pandemia en el Pro- grama “La poesía y tú” conducida por un gran poeta, decimista y perio- dista Víctor José La Chira Acevedo (fallecido). Y en el programa “El canto del búho” conducido por el gran poeta, decimista, compositor Iván Santa María Saavedra. Ha participado en la Antología internacional “POETAS CONTEMPORÁNEAS” 2022.PARTE II. Ediciones APER. Creación de Drugot. Mayo del 2022. También ha participado en la Antología “VOZ CELESTIAL”. PoesíaTo- tal. Ediciones Vicio Perpetuo. Vicio Perfecto. En el mes de mayo del 2022. Antología Internacional “POETAS CONTEMPORÁNEAS 2022.parte III. Ediciones APER. Creación de Drugot. Junio del 2022. Antología.” VOCES DEL PERÚ EN EL BICENTENARIO “Ediciones Ca- ras de la Cultura. Editor. Manuel López Rodríguez, mes de Julio 2022. Asimismo, participa en eventos literarios convocados.



Mujer guerrera Este poema va dedicado a todas las mujeres guerreras persistentes que luchan cada día, para vencer a la enfermedad silenciosa el cáncer y en homenaje a mis grandes amigas que perdieron la batalla y fallecieron. ¡Mujer guerrera! que caes y te levantas removiendo y exhalando hasta el último aliento, ese último soplo de tu existir. ¡Mujer guerrera! que con firmeza y renuencia vas venciendo a la enfermedad, enfrentándote a ti misma, con tuis miedos y temores. ¡Mujer guerrera! has retado a los días oscuros, a esos días tristes y sin luz. Ahí…la vida se detuvo, te he visto llorar en silencio y navegar sin brújula, pero te mantuviste constante. Marcaste tus lágrimas del dolor, sin preguntas, sin respuestas. Y decidiste retomar tu vida con esperanza, valor y coraje, trasladando los escombros de un mutismo inexorable con una dulce y amigable sonrisa,

aplacando el dolor y aflicción de tu corazón acongojado. Nada pudo arrebatar tus ilusiones. ¡Hoy! Estás arrollidada ante Dios para aplacar el dolor y desconsuelo. que siente tu lánguido corazón. Estás resistiendo y desafiando cada día a la vida, con ésta aflicción, que no tiene edad, ni tiempo, invade…sin igualdad. ¡Adelante mujer guerrera! que el camino es largo, y que la vida te sonría, ya nos estás perdida, tu caminar tiene brújula. Que Dios sea el bálsamo y alivio a tus heridas, eres esencia, perfume, un regalo de Dios. Matilde Mesones Sernaqué

Canto al amor ¡Amor! Enigma indescriptible te canto, con ese suave trinar de un bonancible pajarillo, con su dulce canturreo, fino y primoroso, que atraviesa mi alma, y enciende mis sentidos, sintiendo el latir de tu corazón, tan frágil y presuroso muy juntito al mío. Le canto al amor le canto hoy, le canto mañana, Le cantaré siempre. porque…por ti vivo en la lozanía de una mañana, en un atardecer candente, en un resplandeciente crepúsculo, de la hermosa primavera. Te canto… a ti amor porque eres luz y fuego, que brilla, arde y se enciende en éste corazón apasionado, te cantaré siempre. Porque eres enigma y misterio. Matilde Mesones Sernaqué

Lazos de amistad Nuestra amistad es una alianza con Dios, estamos conectados como la abeja… a su panal, estoy adscrito a tu vida, como el pájaro…al néctar de la flor, como la piedra…al río, como el niño…a su madre. Estamos ligados y acoplados por un cálido afecto, como parte de ella. Lazos de amistad que florecen y se abren a la luz, como pétalos de bellas rosas que perfuman una tibia mañana, con su apacible aroma y dulzura. Siempre estás ahí… tendiéndome tus manos, acertando mis pensamientos y escuchando mis aflicciones. Nuestra amistad es veraz sin tiempo, sin edad, y sin importar la distancia, ahí…estaré para ti, habitando en tu alma y en la profundidad de tu inmenso corazón, entretejiendo nuestros lazos lazos de amistad y hermandad. Matilde Mesones Sernaqué

El silencio de la poesía La gente callada se quedó un mutismo se percibe, se silenció la poesía no entiendo, ¿Qué pasó? Que la alegría nos invada, que llegue un nuevo amanecer, que nuestros versos hablen, que nuestros versos canten y despierten el espíritu que se encuentra dormido. ¡Despierta! Amiga poesía levanta a los poetas que se encuentran aletargados, para que se escuche: el suave sonido de una guitarra, el alegre canto de un payador, tal vez…un soneto, o el dulce canto de unos versos. Para avivar a la poesía que se encuentra dormitando, no duermas tu sueño… dulce poesía. Matilde Mesones Sernaqué

No sé si te amé ¡Hoy ¡Me miro en el espejo ya mi vida cambió ¡Hoy! Me miro en el espejo y me veo feliz y radiante, estoy tranquila y sosegada, siento que todo es diferente, siento que estuve equivocada, mi vida está iluminada, como a veranos candentes, solo fue una quimera como a inviernos frescos, y que jamás …te amé. como a primavera de colores, con sus atardeceres brillantes. Así me estoy mirando, hoy…en el espejo. Todo es más hermoso porque te amo con dulzor y estás en mi corazón, me vuelvo a mirar en el espejo y me pregunto ¿No sé si es amor? me amas con locura y pasión yo tal vez …siento afecto, atracción. Yo era tu reina, tu vida entera, me amabas y así lo percibía ¿Pero qué pasó? ¿Acaso fue una traición? Los caminos se truncaron, las distancias largas se hicieron ¿No sé si te amé? Matilde Mesones Sernaqué

Triste vejez Estoy en mi ventana mirando con tristeza, que los árboles débiles están sus fuerzas han perdido. Las hermosas flores, mustias se quedaron, ya no distingo sus colores. No percibo de las flores su fragancia, sentada, en la banca vieja de mi jardín diviso a lo lejos que los árboles… van deshojando sus hojas, se van escapando, mis días. Las hojas verdes, perdieron su color amarillas y silenciosas se pusieron, mi caminar es lento y callado. Mis pisadas, no se perciben, estoy arrastrando en silencio los mejores años vividos. Mi mirada ya no luce fresca ni distingo un bello atardecer, mis manitas, están maltratadas, hay huellas de cansancio, en mi rostro, mi expresión es triste y de soledad. La vejez…va llegando a mi vida, dejando huellas de lo mejor vivido de esos grandes momentos, y de los sinsabores de la vida. Matilde Mesones Sernaqué

Agua y manantial Agua y manantial “En un crepúsculo de primavera” agua diáfana y transparente, hasta descubrir y explicar vertiente de mi tejado. los secretos del agua. Sonido suave que me acaricia y se desliza por mi piel, El hermoso manantial me cantaba, que me abraza, me sostiene y el agua escuchaba, l y me deja…en la nada. as tiernas canciones, Siento al agua como el aire el sigilo cauteloso y confidencias, que agita el grueso ramaje, de los espíritus fascinados. de mi alma ilusionada que se estremece como torrentes Siento al agua…que me toca, de preciosos y celestes luceros, siento al agua…que me acaricia, sobre el cielo infinito y el tañido de luciérnagas azules que me toca y me suelta, decorando la noche enamorada. buscando la profundidad, en las hebras de mi amplia cabellera. Soy agua y manantial; Ahí…encuentro a la piedra madre, soy principio y fin eterno. que brota del agua de la vida. Eres surtidor de mi fuente y manantial de mis pasiones, Mi corazón no entendía, donde mi espíritu se debilita emergí una y otra vez en el ojo, del agua cristalina. en la oquedad y entrañas Juntos bebimos del oculto manantial. el agua del manantial. Buscando una respuesta que al fin encontré, brotó…el agua del amor, y nació…el agua de la vida. Matilde Mesones Sernaqué

Poeta Internacional Oliva Paredes Morales Santa Rosa / Ecuador Olivia Guillermina Paredes Morales. Maestra Jubila- da. Título de cuarto nivel: Magister en Investigación Educativa y Docencia Universitaria. Escribe prosa y verso y poesía clásica. Miembro correspondiente de la Casa de la Cultura Benjamín Carrión Núcleo de El Oro. Primer Miembro del Directorio de la casa de la cultu- ra Benjamín Carrión Núcleo de El Oro. Miembro Honorario del Movimiento Internacional VUELO DE MUJER. Directora dela Organización Poética Internacional Independiente OPII y su Recreo Poético Marta Alta- mirano de Álvarez vía On line, Preparación poética Internacional: I al VI nivel en CAUDAL DE LETRAS de México. Tallerista de POETAS EN CONSTRUCCION en Mé- xico, del I al V, nivel Participante en varias ferias virtuales del libro en U.S.A, Perú, Chile, Brasil y México con VUELO DE MUJER, en Londres con CHASICOARTE de Argen- tina. Participante en la Antología de POETAS CON- TEMPORANEAS 2021 y 2022, de Ediciones Aper, Argentina. Producción: Mis Poemas de antaño, 1999. Ajenjo y miel, 2021.

Surcos profundos Escuché desde lejos un latido de palpitaciones tenues que atisban la distancia, con sus deformados dedos construye una visera que por debajo mira el camino que muere en un recodo. Por lo que puedo ver, no encontró su objetivo y vuelve a ser latido, un paciente latido. Se acercaron distancias entre nuestras pupilas, Y ese latido tenue era una cabellera gris, apoyada en un banquillo rústico y desgastado. El sol en su carrera destiñó sus atuendos, el viento del tiempo rasgó su textura. Una sombra de tedio cubría sus trenzas plateadas besando su espalda. A la voz de mi intriga… ¿qué hacía sentada a la vera del tiempo? Respondió: Aquí esperando, mi hijo dijo que volvería. y ¿Cuándo se fue?, pregunté apenada… me mostró una tablilla, con carbón señalada círculos de negrura que más ya no cabían eran las tantas lunas que ha durado su espera. Elevé su rostro para darle un consuelo Y pude ver un sin fin de pliegues, más dos de aquellos eran surcos profundos por donde recorrían dos ríos de ternura, ríos de eterna espera, mirando aquel camino que muere en un recodo, más los gélidos lazos de la muerte… la esperan. Oliva Paredes Morales

¿A dónde os fuisteis? En alas nocturnales y con soberbia inquina llegó silente el afanoso insomnio, a robarse de mi almohada aquel bordado con mis sueños antes de despertarme. Entonces mis instintos trataron de abrazarte, anhelando abrigarme en tu regazo y conciliar el sueño… y mis brazos se llenaron de vacío, vacío que dejaste furtivo, cauteloso, vacío que llenaste con una fría almohada. ¿A dónde os fuisteis, mío? ¿Qué otro lecho te espera? ¿Qué te ofrece la noche que yo no te ofreciera? Debe ser un imán, ladrón de media noche de escamosas argucias, de alcantarillas rotas. No sé si agradecerle al insolente insomnio, no sé si preguntarle si él te vio partir, y si te vio partir, ¿sabe cuándo regresas? o me lleno de tedio, me irrespeto y me ahogo llenando tu vacío con cualquier otro soma. Oliva Paredes Morales

Luna ausente Testigo es mi ventana que salí a buscarte, soporté todo el frío que mi rostro besaba, vi caer unas cuantas estrellas, Y la osa mayor con pena me miraba. El ejército entero del sobrio firmamento danzaba, titilaba, en frenético empeño, jugaba como niño con rutilante empeño antes de que la noche le ceda paso al día. Y tú no te asomabas hasta la madrugada, cuando mi yo, cansado de atisbar el celaje iba a abandonar mi balcón, mi testigo pude ver de reojo, tu reojo furtivo. Me escondí tras los tules, dejando un resquicio y miré desde adentro tu silente llegada… traías fango en tu falda y rotas tus enaguas, traías en el rostro tu boca despintada. Mi congoja fue grande al ver que te apagabas, no traías el brillo, estabas opacada más como ya era tarde y el día clareaba lloré con tu dolor, lloré por tu congoja. Oliva Paredes Morales

Conmigo mismo Me gusta ausentarme más no sé de qué, me gusta alejarme Y no sé por qué; si aunque me ausentase, preciso volver no sé los motivos ni sé para qué. Mientras mis pupilas atisban absortas la veloz carrera, de todas las cosas, en reversa incierta para mis sentidos, y encuentran mil cosas, mil rostros en desfile eterno y no sé por qué; el cristal opaco de los ventanales del tren que me lleva o del tren que me trae, se burla, se ríe de mis pensamientos teñidos de ansias, teñidos de nada. Oliva Paredes Morales

Sin sentido ¿Cómo preciso respuestas en ausencia de preguntas?, preguntas que no las hago, porque no tienen respuesta. Yo que he tomado la copa, hasta la copa del árbol, estoy en un laberinto, laberinto sin salida Creo para mis adentros que se me ha secado el alma, ya no corre por mis venas la miel de mis sentimientos. Solo encuentro un gran vacío que cruje entre las estrías, estrías y cicatrices crudas ante tus recuerdos. Oliva Paredes Morales

Hacia el patíbulo Gélido banquillo de sobrias medidas hay en el cadalso a donde se acerca con ronco sonido en vez de una queja, aquel asesino que mató un verano. Claro que mató, mató a los minutos, segundo a segundo ahogó su resuello, martilló la testa de las horas huecas hasta convertirlas en grumos de tiempo. Se cansó de tanto pisar hojarasca cuya melodía de voz carrasposa, entra a sus oídos como los otoños que llegan y matan a la primavera. Se encontró exhausto, casi sin aliento, mojado hasta el alma de resentimientos por haber bebido el zumo de invierno, por haber parido versos en verano. Buscando un motivo, le partió la cara al rayo de sol que irrumpió sus sueños, logró detenerlo en su algarabía, le pintó de luto matándole al día. Asume la culpa de sus desmedidas y pone silente su cuello despierto, bajo la experiencia de la guillotina en beber la sangre cual si fuese vino. Oliva Paredes Morales

Sonrisa Burbujas al aire, color de arco iris desfile de perlas, de perlas de nácar, hoyuelos de seda junto a tus mejillas, esa es el aura de una sonrisa. Calidez y calma trae en su bagaje, bagaje de ensueños, confianza, ternura, tibieza escondida, batir de palmeras besos a la brisa, eso es la sonrisa. Imán que te atrapa, agua de arroyuelo, un oleaje suave, es una sonrisa. Cuando en el ocaso de mis primaveras vengan arreboles a cerrar mis ojos, lo único que quiero que se me conceda, contemplar en alguien los tenues colores de una sonrisa. Oliva Paredes Morales

Poeta Internacional Sobeida Delgado Mina Buenaventura / Colombia Sobeida Delgado Mina, Poeta y Escritora. Nació el 28 de enero de 1978 en Buenaventura, Distrito Espe- cial Industrial Portuario, Biodiverso, Ecoturístico, Valle del Cauca, Colom- bia. Hija de Silvio Delgado Angulo y María Eliberta Mina Garcés. Madre de dos hijos. Docente Etnoeducado- ra de la Ciudadela Institución Et- noeducativa San Antonio. Licenciada en español y Literatura, Universidad del Quindío. Diplomada en Docencia Universitaria, Universidad del Pacífi- co. Diplomada en Comunicación y Radio, SENA, Diplomada en Estrate- gias Pedagógicas Flexibles para Contribuir a la Calidad Educativa en el Pacífico Colombiano, Universidad ICESI. Enfermera, Prevensalud. Par- ticipó en diversos recitales poéticos en el Museo Rayo, Roldanillo-Valle y en el 5° Encuentro Mundial virtual, de Poetas y Escritores, en el día Inter- nacional de la Paz. Hizo parte del concurso poético Premio Mundial Smard Lion Gold a la Excelencia Literaria. Participó en el II Encuentro Nacional de Oralidad Afrofeminista y es miembro de las siguientes anto- logías publicadas a nivel nacional e internacional:

Antología Poetas Contemporáneas, Argentina (2022) Antología Urdimbres “Las Mujeres del Pacífico Narran su Territorio”, Co- lombia (2021). Antología Voces Poéticas Latinoamericanas, Red @ Némesis de Arte y Poesía, México (2021) Antología Voces del Alma, Red @ Némesis de Arte y Poesía, México (2021). Antología Poetas Contemporáneas en un Canto al Amor”, Creación de Drugot, Ediciones Aper, Argentina (2021). Antología Revista Agenda Mujer Colombia (2020). Antología de Mujeres Poetas Afrocolombianas (2010). Antología Negra Somos, Colombia (2008). Susurros de Pasión: “Poesía erótica”, Valle del Cauca (2000). Libros publicados: “El Grito del Silencio.” Un mar de poesías. Libros inéditos: “Porque amores que matan nunca mueren” (Poema lírico - erótico). Las puertas del olvido (Poema - patriótico). De ­­­__ Presión (Novela). Bienvenido Benavidez (Cuento). Páginas web: Festival de poesía y narrativa. Registro mundial de poetas. Poesía y Café. Poetas, Narradores y Dramaturgos. Poepaz Grupo. Unión Mundial de Poetas y Escritores. Unión Mundial de Poetas Colombia. Voces poéticas Latinoamericana. Utopía los Poetas más grandes del mundo.

¡Tómame! Tómame ahora sin hacer preguntas, ni ideas raras. Antes que la noche se bese con el alba, y no pueda demostrarte cuánto te amo. Quita cada carga de mi cuerpo. Y mójame; con el sudor de tus deseos. Entrelaza tu verbo con el mío; y no pares de besarme hasta que gima. Como leona en celo, o como cuando la mujer está apunto de parir, una nueva vida. Tómame ahora y deja que nuestros cuerpos evaporen, como cuando el volcán erupciona, en medio de las montañas y las nubes. Tómame ahora y hazme esclava de tu amor. Tu pasión… y deseos desenfrenados como caballos desbocados entre el monte espeso y la llanura. Tómame ahora sin recatos, ni vergüenza. Sin temores ni remordimientos. Hoy, que puedo ser completamente tuya. aunque mañana… se cambie el rumbo de nuestra existencia. Sobeida Delgado Mina

Infortunio es el amor En el fondo del placer Se hincha la semilla hallé el hastío, Se abrió mi corazón. y en el fondo del amor Ahí está manando sangre el desengaño. ¡¿Le he dicho yo que haga eso?! Infortunio es el amor. ¡No! Ruge el viento Rebelde corazón… cae la nieve, Él es siempre tuyo. afuera chisporretea la llama en la chimenea. He ahí, los únicos rumores que llegan a mi oído, que tú, bandido, con otra has huido. ¿Hallas raros mis sueños? ¿Será que hay en mi pensamiento algo de la fiebre de mi cuerpo? El clima y la nostalgia, asesinos feroces ¡Matan!... Como la fiebre en medio de los sueños y el delirio. La puñalada del frío es alevosa. Empecé a escribirte con mi intelecto, y como una flor en cuyo seno Sobeida Delgado Mina

Tu ausencia. Tu ausencia me está sangrando, por la herida del recuerdo. Esta habitación vacía pierde y grita tu silencio. Las huellas que dejaste me persiguen, ajenas a esta angustia carnihonda, que hiela poco a poco mi existencia. Tu nombre como una espina que descompone luces y fabrica tormento, llevo clavado en el pecho, con más sangre que nunca y desangrando más que nunca en sueño. Y aunque sé que él es la causa de este cruel desasosiego, en vez de arrancarlo airada, cierro los ojos y pienso, que al corazón no le importa, la lógica del cerebro. Bien sé que ya no eres mío, y que otra se llama dueña, de ese amor de verano que como cristal herido hoy prolongan mi agonía. Pero si tú y el destino, cancelaron mis anhelos, ni él, ni tú, podrán quitarme, éste recuerdo moreno. Recuerdo de aquellas horas que cayeron en el tiempo, de esos instantes felices… ¡que por felices huyeron! Sobeida Delgado Mina

Romance a la distancia Anoche Y tu olfato cuando pensaba en ti con tu gusto soñaba mordisqueaban que acariciabas mis lugares favoritos. mi cuerpo. Con mis gritos sordos Que tu boca traviesa mórbidos y delirante resbalando absorbía por tu oído. todo mi fuego. Anoche Que tus suaves manos Cuando de copitos de algodón pensaba en ti. se anclaron ¡Fui diluvio! en mi tierra ardiente y fértil. entre sábanas y almohadas. Que tu dulce lengua navegaba en el oasis de mi caverna. con tu vista ciega Expectante Dejándome totalmente al descubierto. Que tu esbelto órgano tocaba las siete notas musicales dibujadas en mi pentagrama. Sobeida Delgado Mina

Amores que matan Al principio no se demuestra con actos fuiste fuente. donde se siente placer. Ahora, Pero a su vez, eres el desierto de mis reflexiones. es contigo que aprendí a surfear, Entre las notas musicales de tu alma Fue en tí que aprendí a expresar Engullida en el Tsunami los frutos de tus emociones. de la inspiración comprendí. y reflexión. Que hay amores que matan Fue contigo que aprendí a decir Pero nunca mueren. te quiero sin ningún temor. Sobeida Delgado Mina Fue en ti que descubrí la belleza del varón. Y fue contigo que descobijé y sentí, que no solamente Una vez Se ama en la vida. Es por tí que he aprendido que el amor no empieza con besos ni caricias. que el amor

¡Soy hilo! Cuando conecto mi cuerpo con el tuyo y entre tus dedos entretejo nuestra historia, cerrando heridas, que va zurciendo con besos y caricias, tu cuerpo lleno de tristezas y lamentos. ¡Soy hilo! Reconstruyendo sueños, cosiendo lágrimas, punteando amores, remendando ilusiones, despidiendo el olvido, que como lengua de fuego enfurecido marchitó tu alegría. ¡Soy hilo! Me vuelvo intervalo en tu cuerpo, hilvanando esperanzas, entretejiendo caminos, borrando huellas y sombras. Prolongación del destino. Sobeida Delgado Mina

Poeta Internacional Mercedes Luna Córdoba / Argentina Mercedes del Valle Luna. Nacida en Villa de Soto, provincia de Córdoba. Do- cente jubilada. Escribe por placer, sus versos sencillos son un canto a la vida, plasmados desde el corazón, con pinceladas de amor. Integra grupo literario << Posdata >>. Asiste a encuentros literarios. Activa participante del Movimiento “ Cien poetas más por la paz “ desde 2018 a la actualidad, forma parte de diversas antologías.

En busca de auroras Ella pasaba sus días en un mar de amarguras fueron tantos los desencantos que se tornaron en agonía. Devastada y casi sin aliento viendo sus proyectos desvanecidos cuando el invierno se despedía en busca de auroras, ella marchó Cerrándole las puertas al dolor y a tantos desatinos, vistió su alma de arco iris y con un manto de esperanza la cubrió. Los más bellos momentos en su corazón atesoró y aquellos que fueron un tormento al cantero del olvido los arrojó En busca de auroras ella…un día marchó. Mercedes Luna

En tan solo un instante Con pesadumbre y zozobra Le di reposo a mis ojos para encontrar el sosiego en el mundo de los sueños. Y fue en tan solo un etéreo y lacónico instante que remonté en alto vuelo. Atravesé mil desiertos ríos y mares crucé paisajes maravillosos contemplé la naturaleza toda en perfecto equilibrio encontré. Vi rostros que sonreían Las personas felices vivían pues … sensibilidad, respeto y amor al prójimo había tranquilidad existía ¡Cuánto regocijo mi alma sentía! Pero … fue en tan solo un instante como el irrumpir de un destello que en un suspiro desperté con la realidad confronté y al ver lo enfermo que está el mundo volvió la desazón a mi corazón. En busca de mi calma reponer con esperanza y con fe mi mirada al cielo elevé y en una sentida plegaria por La Paz del MUNDO imploré. Mercedes Luna

Me vestí de primavera Hoy hay primavera en mí Hoy hay primavera en mí entre aromas, colores, un torrente de felicidad revoloteos y trinos me viene a inundar una gran emoción las palabras, hace todo mi ser estremecer cual dulce sinfonía mi corazón florecer se hacen escuchar mi alma rejuvenecer mientras, l Hoy muy afortunada ágrimas de alegría me puedo sentir sobre mi mejilla una gran bendición comienzan a rodar acabo de recibir pues… el tan ansiado anhelo ¡qué voy a ser abuela ! se pudo cumplir me acaban de anunciar. Mercedes Luna

Semillas de paz En el surco de la vida donde se cimientan las raíces y se despiertan conciencias de forjar en el futuro un mundo sin violencia Voy esparciendo semillas recubiertas de esperanza las riego con paciencia con gotas de solidaridad y respeto en abundancia Para fertilizar la siembra libertad, confianza y tolerancia sueños e ilusiones matizados de alegría Florece la sensibilidad crecen los valores destellos de luz y amor impregnan los corazones Seguiré siempre sembrando aún en la adversidad con el deseo ferviente de paz para toda la humanidad. Mercedes Luna

Eterna Agonía Mis vísceras oprimidas paralizadas por el temor naufragan en sombras resisten al dolor. Solo desvaríos y agravios colman amaneceres inciertos eterna y cruel agonía gime en un mar de lamentos. Navega sin rumbo mi mirada perpleja soledad, tristeza gran desesperación refleja. Con eslabones de hastío los sueños encarcelados marchitas las ilusiones y los proyectos anulados. La palabra silenciada se refugia en mi corazón allí yace y se resigna sobrevive a la desazón. Inundan mis pensamientos deseos de liberación lo intento …pero no puedo me ahogo en desolación. Las puertas de mi alma se abrirán algún día para soltar sin vacilar esta eterna y cruel agonía. Mercedes Luna

Caricias de paz Si acordes armoniosos que entonan la cadencia repican en tu mente… es la paz que te acaricia. Si el fulgor de la esperanza enciende tu mirada se luz y guía por senderos de confianza. Si con una sonrisa puedes contagiar alegría dibújala en tu rostro y ofrécela cada día. Si plateados velos de luna te invitan a soñar construye un mundo mejor donde habite la paz. Si crees que puedes ayudar y te sensibiliza la inhumanidad desde el amor procura cultivar la solidaridad. Si con tus palabas logras Llegar al corazón Agradece y vive Acariciando la paz. Mercedes Luna

Desilusión En el umbral sombrío de mi corazón herido el eco de un lamento solloza en silencio. Puñaladas de hastío horadan insondables arrebatan los sueños matan mis ilusiones. Tanto agobio y desilusión abruma mis sentimientos deseo encontrar sosiego equilibrio y bienestar. Ay! corazón que palpitas ayúdame a soltar dejando que todo fluya y que renazca el amor. Mercedes Luna

Poeta Internacional Silvia Melano Córdoba / Argentina Silvia es Licenciada en Psicología y Fotógrafa. Durante los últimos años ha comenzado a escribir poesía, natural inclinación por expresar vivencias, recuerdos y reflexio- nes con un sentido estético y atendiendo a los detalles, en- contrando así su modo de ex- presión. Es su profundo interés desa- rrollar en este género el len- guaje del amor y adentrarse en el camino hacia el interior del alma, fuente de Luz, Manantial de Inspiración. Hace cinco años comenzó a realizar Talleres de Escritura Creativa en ´´ Casa de la Poe- sía ´´ a cargo de Adriana Mora- les, en Río Tercero, Córdoba. Su ciudad natal. Los escritos aquí presenta- dos son una selección cuidadosa de sus producciones en estos años, siendo ésta su primera publicación. Espero la disfruten.

Segundo eterno Homenaje a mi Abuelo Segundo, vendedor de golosinas. Y es que me haces volar Como mariposa a la flor... Sabes bien que ese lugar permanecerá eternamente en mí. Con tus brazos cálidos me alientas a subir... allí quedo atrapada, rosa chicle, verde menta, amarillo banana, jirafas celestes, tatuajes de colores son mis preferidos. \"Elegí hasta que tus brazos no puedan cargar más\" :- me dices. Y es que ese pasillo mágico, esa luz tenue iluminando mis sentidos, quedará grabado en mi corazón. Si pienso de dónde viene la magia... la magia eres tú... Eternamente tuya... Silvia Melano

Los rojos brotes de las rosas El silencio nos asiste a un despertar distinto, suspendidos en los últimos susurros del invierno… Son los regocijos de su Memoria emergiendo victoriosos en los brotes de la rosa. Hoy resisten el frescor de la ventisca que llega de las sierras. Pronto los cálidos recuerdos de verano nos traerán coloridas compañías, con fragancias prodigiosas nos devolverán al Hábito sencillo de inaugurar el alma después del trabajo escondido. Su sonrojo, porque todo sabe. El mío, porque todo sueño… Silvia Melano

Amor Esa tarde tu abrazo insospechado, me obsequió el Sentir… La cuna cálida del descanso, el roce suave que acaricia la piel entera, sin detalle extraño, el impulso de abrigar deseos, la osadía de desvestir los besos. Cerrar los ojos, ceder al deleite, ofrecerte disfrutar la vida con delicia vehemente, expandir el lapso que nos enlace al culto de elevar los cuerpos en Divino vuelo. Sí… abrazar el Corazón es un gran Comienzo. Silvia Melano

Mi cielo Aclara el día, carmín dorado celeste, más celeste rosado oro azul azul noche. ¿Dónde estás, Mi Cielo?... Diamante negro tu mirada, en su reflejo un dulce ángel habla, llevará noticias …llegarán al Alba. Silvia Melano

Corazón de fuego Desplegó el lienzo. Su pincel inquieto, tomó la tinta rosada sin comprenderlo. Pintó la noche con luna llena, rosadas curvas y gaviotas blancas trayendo estrellas. Es que la extrañaba tanto… Sonrisa alegre, piel al viento… Y así la pintó recostada en el manto crema, a la hora en que el sol su brillo guarda y la luna no consiente un olvido de amor. Si Victoria regresa un día será su voluntad y desandarán el destino grabado invisible en un rincón. Él mantiene en su obra la memoria en vuelo, hasta el día en que los detalles salten animados del lienzo y la acuarela, con inusitado contraste reflejo, lo devuelva …al pie de su Atril, teñido de sueños… Silvia Melano

Aprender Cómo dice el Maestro: “Si no lo ves, no puedes hacerlo”. … ¿y dónde lo he visto? Más que ver, te diré: lo he vivido. Lo que para algunos es angustia y pobreza, para mi fue luz y alimento. Y nunca dejó de serlo… Entre escapadas a conventillos vecinos, con mujeres laboriosas de pañuelos al cuello, pasé una niñez de cuento. Allí, la magia reemplazaba al miedo… Crecimiento sin juicios, ahogo de prejuicios. De canastos con lanas de colores, los tejidos me enseñaron de procesos, las historias me enseñaron a escuchar… La presencia eterna de esa gente sin rostro y sin tiempo, me enseñó a confiar. Cocinas cálidas me hospedaron, ollas humeantes despertaron mis sentidos, calor humano aún con braseros encendidos y Siempre, Siempre un mate sin pedirlo. Ojos que miraban atentos me permitieron cuidar cada partecita del cuento. Hoy lo pienso entregada al silencio, descubro … es mucho más que un hermoso recuerdo. Silvia Melano

Oficio He abrazado mi profesión con mucho placer todos estos años... Avanzo por las luces de la tarde, Silvia Melano un suave perfume a flores me acompaña. Cruzaré varios jardines secretos, en algunos regaré, en otros, el silencio sembrará sobre sus sombras un resplandor de gloria. Un Vasto imperio de olvidos habita sus centros el clamor por la Verdad brota de ellos como lava de un Volcán. Cuando lo cautivo llega a la puerta, allí se convierte en Mirador, silencio puro, estado quieto cometa en el Aire, suelto. Ahora hay alguien que habita su fuente de luz, asumiendo el resplandor. Yo sigo en mi oficio, un suave perfume a flores silvestres me acompaña …

Poeta Internacional Nidia Antonia Vergara La Rioja / Argentina Nidia Antonia Vergara, 69 años de edad, nació en la Ciudad de La Rioja, Capital, ha sido siempre una lectora voraz y se ha nutrido de libros de los más diversos géneros. Durante años se desempe- ñó como funcionaria en una dependencia gubernamental. En la actualidad, ya jubilada, se dedica a tiempo completo a su familia y a la escritura. Socia de SADE (Sociedad Argentina de Escritores) La Rioja, Fi- lial “Ariel Ferraro” y coadministradora de la página “Poetas y Es- critores de La Rioja, Argentina “OCHO MESES DE AGONÍA”, lleva impresa ya su 3ra. Edi- ción. Su novela “NO DOCE, SINO TRECE”, fue inserta en su li- bro: DICTADOS DEL ALMA, edición resultante de un taller lite- rario. “SUAVE PAÑUELO”, fue galardonado en el “66° Concurso In- ternacional de Poesía y Narrativa ‘Premio a la Palabra 2019’. Además, fue inserto en la edición N° 4 de la revista digital MO- NIarte.

“RENUNCIA”, fue seleccionado en el Certamen Internacional de Poesía “Tierras Poéticas 2020”, Equinoxio Argentina, pag. 61 de su Antología. En el 2021, publicó su libro de poemas “HUMILDE PLU- MA” y cinco de sus poemas, fueron pu- blicados el 15/4/21, en el Suplemento 1591#Cultura+Espectáculo del Nueva Rioja. El 25/7/21 en Sección “Lecturas”, el periodista Lic. Fernando Viano, con el título “Con las Palabras del Alma” se refirió al contenido del libro. “ROSA”, poesía, fue ganador de los JUEGOS EVITA 2021, en la instancia departamental, Municipio Capital, Setiembre/21 y en la provincial, Noviembre/21.

Nueva oportunidad Escuché el melifluo de tus pasos, presentí el azul dorado de tu mirada, mi corazón latió hasta enloquecer, traté de calmarlo, mi voz sonó natural al invitarte a pasar y sentarte a la mesa donde acariciaba mi copa de brandy. Te serví un trago, lentamente bebiste un sorbo y tus labios me invitaron a besarte. No pude hacerlo, no fue posible olvidar el inefable dolor de tu abandono. Un diálogo corto, efímero, sin rencor, nos separó para siempre. Mi única compañía, mi único consuelo, fue el Jerez acendrado, que suavemente se deslizaba por la garganta, prometiéndome que el Creador, tendría una nueva oportunidad para éste sesentón, que aún cree en los milagros… Nidia Antonia Vergara

Pasado Llueve en la Ciudad nostálgica, La quietud de mi alma es imperturbable, Las lágrimas recorren intermitente mi rostro, Mis sueños se sienten pisoteados. Te busco mi niño y hasta del recuerdo partiste, Los años pasaron inexplicablemente veloces, Ya no recuerdo tu voz, ni tu sonrisa, Ni el color de tus ojos que me enloquecían. Niño, tu dulzura apareció en mi memoria, ¿Será por la suavidad de la lluvia deslizándose perezosa por los cristales de mi ventana? ¿O mis añejos años, me devuelven al pasado? No quiero recordarte, no lo mereces, Nuestra juventud quedó en la penumbra, Mi vida, niño, ya no puede retroceder, Para complacer tus caprichos como entonces, Porque ahora, el abrazo que me dieron hace instantes, Me insta a ser feliz eternamente. Nidia Antonia Vergara

Ternura de amor El cristal de mi copa, dejó ver tu figura esbelta, Mis ojos plomizos de dolor, parpadearon perplejos, Hice un sorbo, y el licor recorrió mi garganta herida, Te presentí, te adoré, te esperaba y llegaste. Tus labios de príncipe orgulloso, se abrieron para decir: ¡Hola! Una dicha inconmensurable, recorrió mis venas, Estabas a mi lado nuevamente, con tu tierna presencia, El corazón latía sin cesar e inconscientemente me desperté. No eras un sueño, me detuve a tu lado y tu perfume me extasió, ¿Qué podía reprocharte? ¿Qué hayas vuelto? Mi complacencia fue plena, no pude disimular, Sin un regaño, abracé tu cintura y salimos a caminar por el parque, Gritando al mundo ésta ternura de amor, que nos envolvía. Nidia Antonia Vergara

Designio de Dios Aquel camino dorado, solo sabe de placer, Placer, mi niño pequeño, por cada mirada tuya, Que me hizo estremecer. Ahora que feliz estamos, las gracias le doy a mi Dios, Porque te retuvo a mi lado, por tantos años de amor, Que pudimos sostener, en cada amanecer. Mi niño no pienses nunca, que lo nuestro es pasajero, Mira los años que tengo y aún me siento tan joven, Cuando tu mirada, jugando, me dice cuánto me amas. Sabrá de nostalgias el corazón, palpitar, una y mil veces, Pero nunca sabrá de olvido, ni de amores pasajeros, Porque Dios lo decidió, que vivamos perenemente, Unidos y sin rencor, saboreando éste amor, Que nos unió para siempre. Nidia Antonia Vergara

Esencia Dolor que a veces quiebra el alma, Nostalgia vana de un amor dolido, Simpleza turbia de recuerdos marchados, Dulzuras latentes de violetas marchitas. Ocaso anhelante de besos despojados, Quietud de miradas simples y burlonas, Suavidad añeja de recónditos días, Locura salobre de inocentes suspiros. Podrá el tiempo transformar el pasado, Podrá la nostalgia transformar el destino, Pero jamás la vida transformará lo vivido, Hechizo sonoro de un simple sollozo. Al fin la melancolía de atardeceres soleados, Dirán la verdad oculta en un sueño, Quizás presentir amaneceres confusos, Pero nunca descubrirán los cinceles de la esencia. Nidia Antonia Vergara